Este producto pretende ser un poco la guía completa sobre el cultivo de habas, de la siembra y los cuidados a la recolección en nuestro huerto o huerto urbano. Asimismo es viable plantar las habas en macetas para tenerlas en terrazas o balcones.
Hay que tener particular atención al drenaje del suelo, puesto que las habas no aguantan los suelos encharcados, más bien los eligen secos que filtren bien el agua. Pero ojo, no confundamos las características del suelo con las necesidades de riego, ¿no? En lo que se refiere a eso, mucho más vale exceso que defecto de agua, puesto que tienden a ser bastante sensibles a la carencia de riego.
Tabla de Contenidos
¿De Qué Forma Cultivar Habas?
La plantación de las habas se realiza en plano o en un pequeño caballón. La planta de las habas primerencas de Muchamiel forma frutos de enorme calidad para su consumo fresco.
Las habas primerencas de la variedad Muchamiel son habas muy demandadas por los labradores y los aficionados a la horticultura. Las habas son uno de los más importantes cultivos en la región de la Comarca de L´Alacantí, en esta comarca nos encontramos nosotros, por eso apreciamos tanto esta legumbre. En internet puedes encontrar de manera fácil muchas variedades de habas diferentes.
¿cuándo Se Siembran Las Habas?
Realiza agujeros de una hondura que no sobrepase 3 veces el tamaño de la semilla y también introduce tres habas. Así mismo nos aseguraremos que alguna de las semillas germine, caso de que germinen las tres escogeremos la planta mucho más sana y fuerte retirando las otras 2. Las semillas de habas se pueden colocar la noche antes sumergidas en agua para facilitar y apresurar la germinación de éstas. Elaborar bien el lote, es importante cultivar en un lote suelto y con buen drenaje.
Aguantan bien el frío hasta 6⁰ o 7⁰, pero con temperaturas más bajas es conveniente proteger el cultivo con manta térmica (o trasladándolo al interior si es en maceta). Comunmente se siembran entre agosto y noviembre, pero también se puede extender un tanto más.
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Sin embargo, con temperaturas sobre los 20 ºC, especialmente en el momento de plantación, las semillas no germinarán apropiadamente. Este es uno de los puntos mucho más importantes en el momento en que se cultivan habas, puede que sea el que más relevancia tiene. Estas plantas requieren de un sinnúmero de luz solar para medrar, con lo que no son un cultivo conveniente para condiciones de interior ni de semisombra.
Las de “verdeo” esto es, las que cultivamos para consumir las vainas, debemos sembrarlas en otoño o entre mediados y finales de invierno, evitando la temporada más fría del invierno. La haba, de nombre científico Vicia faba, es una planta leguminosa que resulta especialmente útil como cultivo de otoño o invierno debido a su capacidad de enriquecer el suelo fijando el nitrógeno atmosférico. Merced a esto, cultivar habas en nuestro huerto a lo largo de los meses fríos, en que en muchos casos no se explota tanto la tierra, es un gran método para devolverle al suelo nutrientes de manera completamente natural. El cultivo comienza por siembra directa en su localización definitiva con semillas de habas que vamos a poner en remojo la noche anterior para hidratarlas bien y facilitar su germinado.
Habas Y Nutrición
La separación de las plantas es importante para una adecuada aireación de las futuras plantas. Colocar golpes de 3 a 4 semillas por cada hoyo de siembra con una hondura de unos 5 centímetros. Más tarde realizar un riego abundante para una buena hidratación del suelo. Entre 90 (aparecerán las primeras habas y 120 días (su máxima recolección) podrás realizar la cosecha de habas.
Sembrando una tanda al mes podremos gozar también de las muy ricas habas a lo largo de muchas semanas. Si por algo se caracteriza el cultivo de habas es que es idóneo para alguien que se está iniciando en el huerto.
A propósito, que una vez terminado el cultivo resulta conveniente incorporar las plantas a la tierra porque son un increíble abono. Y hay que ya mantener una alguna humedad a lo largo del resto del tiempo de cultivo.
Los mesopotámicos observaron que sembrar una misma clase de planta en diferentes fases lunares generaba desenlaces distintas. Nosotros les recomendamos realizar la siembra antes de la primera quincena de septiembre.